domingo, 11 de diciembre de 2011

 La felicidad.

Un día cierto mercader envió a su hijo con el mas sabio de todos los hombres para que aprendiera el secreto de la felicidad . El joven anduvo durante 40 días en el desierto , hasta que llego a un enorme y bello castillo en lo alto de una montaña . Allí vivía el sabio que buscaba.

Sin embargo , en vez de encontrar a un hombre santo , nuestro héroe entró a una sala y vio una actividad inmensa ; mercaderes que entraban y salían , personas conversando en los rincones , una pequeña orquesta tocaba melodías suaves y había una mesa repleta de los mas deliciosos manjares de aquella region . El sabioconversaba con todos y nuestro héroe tuvo que esperar 2 horas para que lo atendiera .

El sabio escucho atentamente el motivo de su visita , pero le dijo que en aquel momento no tenía tiempo para explicarle el secreto de la felicidad . Le sugirió que diese un paseo por el castillo y volviese 2 horas mas tarde.

- Pero quiero pedirte un favor. Añadio el sabio entregandole una cucharilla de te en la que dejo caer 2 gotitas de aceite.- Mientras caminas lleva esta cuchara y procura que no se derrame ninguna de las 2 gotas.

El joven subió y bajó escalinatas y recorrio pasillos por 2 horas y luego volvió con el sabio.

- ¿Que tal? -Pregunto el sabio- ¿Viste los tapizes de Persia que hay en mi comedor?¿Acaso viste el jardín que mis maestros jardineros tardaron 10 años en crear?¿Reparaste en los bellos pergaminos que hay en mi gran biblioteca?.

El joven avergonzado , confesó que no había visto nada . Su unica preocupación eran las 2 gotas de aceite y que estas no se derramaran .

- Pues , entonces vuelve y recorre las maravillas de mi mundo. -Dijo el sabio- No puedes confiar en un hombre si no conoces su casa.

Ya mas tranquilo el joven tomó nuevamente la cuchara con las 2 gotas de aceite y volvió a pasar por el palacio , esta vez , mirando con atencion las bellas obras de arte que adornaban las paredes , los bellos jardines llenos de flores preciosas , las hermosas esculturas que el sabio poseía . De regreso a la presencia del sabio , le relato detalladamente todo lo que había visto.

- ¿Pero donde estan las 2 gotas de aceite que te confié. - Preguntó el sabio.

El joven observó la cuchara y vio que sin darse cuenta las había derramado

- Pues es el unico consejo que puedo darte. - Le dijo el mas sabio de los sabios.- El secreto de la felicidad esta en mirar todas las maravillas del mundo , pero sin olvidarse de las 2 gotas de aceite en la cuchara

miércoles, 2 de noviembre de 2011

Maybe This Time...



Maybe this time, I'll be lucky
Maybe this time, he'll stay
Maybe this time
For the first time
Love won't hurry away

He will hold me fast
I'll be home at last
Not a loser anymore
Like the last time
And the time before

Everybody loves a winner
So nobody loved me;
'Lady Peaceful,' 'Lady Happy,'
That's what I long to be
All the odds are in my favor
Something's bound to begin

It's got to happen, happen sometime
Maybe this time I'll win
 
Esta es una de esas piezas únicas, de las que se te quedan en la cabeza metidas, y recuerdas, y recuerdas...quizás por la propia pieza, por su música, o quizás por su letra. Es triste si se observa, e ilusionante si se lee. Quizá ahora...
 
Oír es precioso para el que escucha.

sábado, 29 de octubre de 2011

¡Leeme!

Léelo. Vuelve a leerlo.
Ahora piensa. Piensa si tiene razón. Piensa, si crees que tiene razón, en si te comportas como lo que lees ahí. Si hay algo que no te gusta...cámbialo. En el cambio no hay nada malo. En el cambio está el temor. Y si vences el temor, sólo hay algo más que se te presentará. Quizás no te guste. Quizás no lo desees. Quizás te cagues de miedo. Pero, si lo consigues traspasar, aún con todo lo malo que encuentres más adelante, podrás sonreírte a ti mismo y decirte..."Lo has hecho"...

Feliz 23 cumpleaños, porque va a ser el más importante hasta ahora.

Nunca es tarde. Actúa. Piensa. Cambia. Hazlo! Hazlo porque...

No perdáis una hora, porque no estáis seguros de un minuto.

lunes, 24 de octubre de 2011

Un último amanecer.

Las briznas de hierba tomaban sus dedos, acariciándolos, abrazándolos, con sutiles movimientos llegados gracias a los suaves vientos. La débil figura en esa oscuridad se arropó en el tronco de ese árbol, que dulce, como una madre protectora, tomaba su cuerpo entre sus ramas, entre sus hojas, que salpicadas del leve resplandor de la luna se impregnaban del rocío que hacia prever que la mañana se acercaba, a ese negro fondo de oscuridad.

Una mirada, una única mirada hacia las aguas que se extendían ante ella bastó para que pudiese ver, entre la disputas de las sutiles olas, el ya débil resplandor de la luna en ellas. Entonces un suspiro rasgo el viento, el silencio. Sus manos tomaron esas briznas de hierba, ahogándolas entre sus débiles dedos, haciéndoles expirar sus vidas al ser arrancadas con extremo cuidado, con intenso dolor. El viento sopló, con gran sutileza haciendo que un éxtasis de sonidos cobrasen vida entre su larga melena rubia, que en rizos, cubría su rostro. El dorado refulgente de su cabello confundía a los silbidos, perdía en un laberinto de inalcanzable salida a los susurros atraídos a ella, mas este laberinto rompió sus paredes cuando su suave mano removió sus rizos, trasladando a los murmullos del aire hacia una inmensidad, y en ese momento, se sintieron solos, perdidos donde siempre estuvieron.

 Un temblor, la caricia convertida en temblor, los dedos arrancando una lucha contra la serenidad, la firmeza y la frialdad. Buscan el rostro, aquel rostro regado por lágrimas que la luna encarga de tornar a leves gotas de plata que se congelan en hirientes cristales al caer. Con una leve inclinación de su rostro su cabello cae sobre uno de sus hombros dejando a la vista el puro e inocente semblante al reflejo de la luna, la cual, maravillada, lucha por atraparla, envolverla entre sus rayos de plata, acogiéndola en su dolor. El verde de las campiñas y los bosques halló una argéntea mirada y en ella encontró consuelo, una ternura interminable, que sin remedio se deshacía en la lejanía a la vez que luchaba por aproximarse a ella, tomarla entre sus brazos, compartir el sufrimiento, entenderla. Esa sutil luz inundada en plata se palideció hasta terminar por desvanecerse dejando que las últimas miradas de la luna se entremezclasen con los dorados reflejos del sol, que anunciaba su llegada a un día sombrío, y en ese momento la luna lloró, y regó los campos con su luz, con su lamento, antes de desaparecer de la mirada verde que la contemplaba. 

El sol asomó en el horizonte mientras sus primeros rayos se confundían entre plata y oro. La mirada de ella se dirigió hacia el astro, que grande anunciaba la hegemonía del cielo por unas horas. Sin más demora cerró sus ojos verdes, dando el mayor castigo posible al sol, la ausencia de su mirada, la ausencia de su vida, en su último amanecer.  

¿Qué sentido tiene correr cuando estamos en la carretera equivocada?

Hoy no es un día más.

Hoy no es un día más. Es el día en el que, viendo otro puñetero blog (Jaque Mate) me he decidido a hacer esto.

Vamos a hacer un trato. Yo expongo aquí todo lo que se me ocurra. Mis curiosidades, a veces lo que mismamente pienso, y a cambio nadie echa en cara nada a nadie. Es fácil, sencillo, y al que no lo guste lo puede dejar con facilidad. O me olvido de escribir o pasamos de leer.

No te extrañes de leer cosas raras, porque las vas a leer si te metes por aquí. No seas tímidill@ para dejar un comentario. A veces un comentario que viene de otro anima más que miles de los que te dices a ti mismo en la cabeza.

"Recorre a menudo la senda que lleva al huerto de tu amigo, no sea que la maleza te impida ver el camino."